Capitulo 7

Comienza un nuevo día. David y Salvador coinciden solos en la cocina. Salvador va a agarrar una tostada a la vez que David . Se agarran de la mano. Se estremecen. Salvador se pone nervioso. Se aparta de su sobrino.
--oí madrugaste ¿no?
Salvador está muy tenso. Trata de sacar un tema de conversa. A David le duele ver la frialdad con la que lo trata su tio.
--Sí es que quiero pasarme por la biblioteca al salir de clase y tengo que aprovechar para estudiar ahora...
--¿y porqué no estudias en la biblioteca? --sorprendido.
David le sonrie:
--porque voy a conocer chicos guapos para estrenarme... Me lo recomendó tu hijo... ¡y funcionó...¡ Estoy seguro que de esta pierdo la virginidad.
Salvador fuerza una sonrisa.
--pues me alegro...
--¡si claro¡
David está desafiando a su tío con la mirada. Es como si le dijera, si no te acuestas conmigo pronto lo haré con otro. Salvador le adivina los pensamientos y eso le pone rabioso pero sabe que no debe entrar en el juego de su sobrino.
Bernardo entra en la cocina. Su torso desnudo. Aún anda en pijama. Nota que al entrar su hermano y su hijo se han callado.
--¿a ustedes les pasa algo?
El hombre los mira con atención trata de averiguar lo que le ocultan pero ellos disimulan y el hombre jamás imaginaría lo que está pasando entre ellos. Bernardo se prepara un café. Sale al comedor. Emilio Nicolás está estudiando. Bernardo trata de conversar con él pero Nicolás no le hace caso.
--tengo que estudiar...
Bernardo lo mira con cariño y tristeza. Su hijo adoptivo siempre prefirió a su hermano y Emilio Nicolás adora al que cree su padre.
--Es mi único hijo de sangre... Es mi castigo por renunciar a él --dice para sí con tristeza.
El hombre vuelve a la habitación. Se quita el pijama. En ese momento Natalia en la habitación y se deleita con la desnudez del guapo hombre. Aunque no por mucho tiempo. Bernardo se tapa con las manos sus genitales. Se pone muy nervioso.
--¿¿qué haces? ¡¡mi mujer está en la ducha¡
La trata con dureza. A Natalia le duele que el hombre haga como si ella no tuviera derecho a estar con él, como si no hubieran tenido nada. Natalia ha estado siempre en la sombra, alejada de ese hombre pero ya se está cansando. Habla con desafío.
--si y nuestro hijo en el salón... a lo mejor es hora que todos se enteren...
Bernardo se angustia mucho. Se sienta en la cama. Se tapa su desnudez con la sábana.
--¿qué quieres?
Natalia se sienta a su lado. Se le quiere tirar encima. Apasionada le dice:
--A ti.
Bernardo se levanta, se envuelve en la sábana.
--¡ya respecta que soy un hombre casado...¡ ¿¿qué te pasa?
Tener cerca ese error del pasado es algo que preocupa a Bernardo, que lo asusta. Siente que es un peligro para su matrimonio pero Nicolás es su hijo. No puede echarlo a la calle y sabe que se iría si echa a su madre. Natalia está enamorada de él.
--toda mi vida he esperado que reconozcas mi sacrificio pero te borraste.
Bernardo va a buscar su pantalón. Está nervioso.
--¿¿qué quieres? ¿¿dinero? ¡¡cuanto quieres para dejarme en paz?¡
Natalia lo mira dolida
--siempre me tratasta como una cualquiera... Nunca me entendiste...
Natalia deja solo al hombre. Se queda más tranquilo. Bernardo se siente culpable con su hermano, con sobrino. Se lleva las manos a la cabeza:
--ojalá Natalia se fuera para siempre... --dice atormentado.


Salvador está apunto de salir.
--hijo, ¿has visto mi celular? No lo encuentro en ningún lugar.
Emilio hace que no con la cabeza.
--tomo el tuyo para llamarme...
Emilio va diciendo que sí, que como quiera. Patricio está desnudo en la cama. Lo despierta el celular. Le desconcierta no es el suyo.
--Salvador... es tu celular... --dice medio dormido.
Se da cuenta que el hombre no está y eso le fastidia.
--¡sabe que me revienta que se vaya sin decirme nada¡
Toma él la llamada.
--¡sí, que pasa¡
A Salvador le pone nervioso que sea Patricio quien tenga su celular.
--vaya, veo que tienes tú mi celular...
Salvador sabe que tiene que ir con cuidado con lo que diga porque David lo está escuchando. Patricio es muy coqueto.
--sí, se te debió caer mientras te vestías...
Y luego es un reprocho:
--claro como te vas tan deprisa...
--Si bueno, ahora paso a buscarlo. Gracias por guardar el celular...
Salvador le habla frío, Patricio es ardiente y apasionado:
--Sabes que me da rabia que me dejes dormido después de hacer el amor... ¿vendrás esta noche?
--si gracias... hasta luego...
Patricio nota los nervios del hombre. Salvador mira sin quitarle los ojos de encima a David que lo observa para averiguar con quien habla.
--no puedes hablar... ?
--no... --secamente.
Salvador le devuelve el celular a su hijo:
--gracias, me lo dejé ayer en la oficina. Lo tiene la mujer de la limpieza...
Emilio Nicolás no le hace caso pero sí David . No era necesario tanta justificación. Se da cuenta que oculta algo. Se acerca a él y le pregunta con ironia al oido:
--es tu amante...?
Salvador se muestra molesto. Habla flojo para que su hijo no se entere.
--¡que te importa...¡
--¿y es chico o chica? --pregunta David con interés.
Salvador mira molesto a su sobrino:
--Eres mi sobrino... no tienes derecho a hacerme este tipo de preguntas...
Salvador se va dejando muy molesto al joven.

David está enfadado con Salvador. Está seguro que se ve con alguien y decide seguirlo pero Salvador se ha ido en su moto y se le escapa. David maldice rabiando. Va hacia la escuela, como es temprano se queda en la plaza que hay en frente. De repente sus ojos se fijan en algo.
--¡que culo¡ --murmura.
David no lo sabe pero es el joven que días atrás hizo disfrutar a su primo Emilio con la visión de su verga. El chico se ha agachado y la visión de ese trasero impresiona mucho a David .
--¡es como a mi me gusta... ni grande ni pequeño...¡
A David le ha gustado mucho ese chico.
--¡tiene que ser mio¡
Mira enloquecido ese trasero:
--¡lo tengo que tener¡
Desea a su tio, desea que éste sea el primero pero su su tío se le niega pues tiene ojos y es mejor disfrutar. Perder la virginidad no sólo como una venganza contra su tio sino disfrutando además.