Capitulo 9

Aunque le cuesta aceptar ese rol paternal, Salvador trata de hacerlo. Le pone la mano en los hombros a David .
--Aunque estés enojado conmigo... Es lo mejor... La casa de los padres se respecta... A mi hubieran matado si me ven en esas...
David se aparta de su tio dolido:
--¡vaya, ya me enteré¡
Salvador le habla con ese tono paternal que tanto odia el joven.
--No tiene nada de malo que tengas sexo con un desconocido pero jamás sin condon... ¿de acuerdo?
David dolido.
--¡dejame en paz¡
David quiere salir del cuarto. Salvador le agarra del brazo:
--¡no te vas sin que me prometas que jamás estarás con un hombre sin condón¡
David mira a su tio con profundidad. Le duele que lo trate como a un sobrino y a Salvador le duele que él esté triste. Además la desnudez del joven lo tiene más alterado de lo que quisiera reconocer.
--tranquilo, los dos éramos vírgenes pero yo pronto dejaré de serlo...
David se aparta de su tío. Se encierra en el baño. Se lava la cara.
--¡no voy a llorar...¡ ¡¡no voy a llorar¡
Le ha gustado estar en brazos de Jose. Lamente no saber cómo localizarlo.
--¡pues será otro¡
Salvador quita las sábanas con furia. No quiere que su hijo se acueste en la misma ropa de cama en la que David casi se acuesta con otro chico. Quiere controlar sus celos pero no puede y se lo reclama así mismo.
--¿¿qué te pasa? ¡¡David es tu sobrino... puede hacer lo que quiera¡
Pero lo lastima. Siente punzadas en el corazón. Se va al salón a tomar un trago para que se le pase el coraje. David aprovecha para vestirse. Va a salir.
--¿donde vas? --le pregunta David con su trago en la mano.
David mira a su tío desafiante y dice:
--A buscar quien me estrene...
--Ni que el sexo fuera una urgencia. Lo más bonito es hacerlo con alguien especial...
Salvador habla como si fuera un simple consejo pero son los celos lo que le hacen hablar. David mira a su tio dolido. Siente rabia hacia él. Sí, él quería que su primera vez fuera bonita, que fuera con él.
--¡tú me obligas a que sea con cualquiera¡ --dice para sí.
David lo mira con reproche y le dice a su tio:
--Si lo es, cuando aún no lo has probado... da igual quien sea pero lo haré y tranquilo, usaré condón... --le dice friamente.
David le quiere hacer sentir a su tio como un objeto sexual, sentir que si lo quería seducir no era por nada especial sino por hacerlo.
--No te debe doler... es lo normal... Es un adolescente. No sabe lo que quiere...
Pero le duele mucho. Una lágrima asoma por su mejilla. Se siente mal por su dolor. Se lo reprocha.
--¡tienes un hijo de 20 años... no podías pensar en serio que tu sobrino sentia algo por él¡ ¡¡David es una hormona con patas¡
A Salvador le ha dolido sentir que su sobrino sólo buscaba alguien con quien hacerlo y no soporta sentirse así. En momentos como esos, Patricio es su oasis.
--¡venga, toma la llamada¡

Patricio está en la ducha. Le cuesta escuchar la llamada.
--¡seguro que es Salvador¡
Sale corriendo. Desnudo, mojado y enjabonado. Lo toma en el último segundo.
--¿si? --pregunta sofocado.
A veces le duele sentirse utilizado por Salvador pero el hombre le gusta mucho y confía en poder tener un futuro a su lado. Salvador necesita descargar su rabia.
--¡pensé que no estabas¡ --dice frustrado.
--es que estaba en la ducha...
--bueno pues espérame desnudo en la cama... ahora vengo...
Para Salvador es sólo un desahogo pero Patricio lo espera feliz.

(Manuel Sosa)
Por su lado, Emilio está en la biblioteca. Nada más entrar ve un moreno entrar en el lavabo. No lo ha visto bien pero parecía interesante.
--¡que se me escapa el morenazo¡ --dice para sí.
Entra en el lavabo. Está cachondo. Por detrás el morenazo es muy guapo.
--¡que culito¡ --dice para sí.
Es pequeñito pero le gusta mucho: Le excita mucho comprobar que el moreno esta muy separado del urinario:
--seguro que se la veo...
Está muy excitado al tener cerca ese chico. Aunque está muy separado la tiene agarrada con las dos manos y no se la ve.
--¡que mala suerte¡ --piensa.
Luego lo mira a la cara.
--es muy guapo --dice para sí.
Aunque no le vea nada, le excita estar a su lado.
--ojalá este morenazo quisiera experimentar con un chico feo --va pensando.
Justo en el momento en el que se la guarda el morenazo, Emilo hace bingo. Mira sediento esa verga que carga el morenazo. Pequeñita, de unos 6 cms y 2 de grosor pero a Emilio le gusta mucho.
--una más para la lista --dice para sí.
El morenazo se va ignorando la cara de pervertido con la que lo mira Emilio. Éste está contento porque ha tenido suerte en su cacería de vergas pero triste porque una vez más sigue solo y virgen. Se mira al espejo con amargura:
--es que con esa cara... ¡si me doy asco¡
Piensa en su primo con amargura y celos:
--él se podrá comer todo lo que quiera...


Los dos primos están en el mismo lugar pero en diferente planta. No se ven. David busca para todos lados. Todo él se revoluciona al reconocer al hombre al que se la chupó.
-¡él, es él¡
Se estremece recordando el placer que le hizo sentir. Desea volver a saborear esa enorme verga. Desea conocer todos los secretos del sexo. Desea vengarse de su tio. Le toca el hombro. El otro le sonríe muy simpático. David mira sediento ese gordo bulto que el día anterior se lo ofreció. Ese hombre es bien varonil.
--¡él me podría enseñar todo¡ --piensa.
Se lo imagina desnudo y casi se desmaya. El hombre pasa de largo y David se queda frustrado. Enseguida se le olvida. Ve un melenudo muy guapo que le gusta mucho. Lleva una camiseta sin mangas. Se le ve buen cuerpo, tatuajes. Le excita mucho. Tiene a ese melenudo a tocar de su mano y se derrite. el melenudo no le dice nada. Está distraido viendo al melenudo. No se da cuenta que el rubio al que se la chupó pasa por su lado. Le toca el hombro muy simpatico. Al hombre le hace gracia ver al chico tan sediento. David al verlo piensa:
--¡ahora¡
Pero no. Al hombre le divierte ver la cara de David al quedarse con las ganas. David va mirando a todo el mundo con relativa desesperación.
--¡no puede ser que hoy me quede con las ganas¡ --dice para sí.
Después de su frustrado encuentro con Jose, David se siente más necesitado que nunca. Sus ojos se van hacia dos hombres, guapos y musculosos y los dos juntos.
--¡que pedazos de armarios¡
Se imagina un trio con ellos.
--¡aunque moriría por verlos a los dos joder entre ellos¡
De pronto se da cuenta que el más armario de los dos va al lavabo.
--¡este no se me escapa¡ --murmura.
LLeva unos pantalones de sport rojos, cortos y anchos pero se le ve un buen trasero. Le decepciona la verga de apenas cinco centímetros y muy fina.
--Demasiada poca verga para tanto cuerpo --piensa.
Aunque él hombre le gusta y David desea estrenarse. Mira sin pudor. Le excita ver como se sacude la última gota y se la agarra por la punta. No se atreve a mirar pero se estremece al sentir que se pone detrás de él. De pronto siente el cuerpo de ese hombre pegado al suyo, su aliento lo enloquece. Muy seductor el moreno le dice:
--¿quieres solo mirar o también solo tocar?
David está excitado y además quiere llegar a su casa y poder decirle a Salvador que se estrenó.


Eduardo Yañez el musculoso al que sigue David

Ruben Sanz el otro.